Al menos 400 nadadores sufrieron intoxicaciones por el agua en mal estado que presentó el Campeonato Nacional de Curso Corto en Guadalajara, según informó el periódico mexicano El Universal.
Distintas fuentes señalan que los problemas en la piscina, la misma que fue utilizada para los Juegos Panamericanos de 2011, comenzaron por la falta de mantenimiento de la administración anterior que gobernaba el estado mexicano de Guadalajara, responsable de las instalaciones.
Desde que la nueva gestión de gobierno se hizo cargo de la situación, las autoridades notaron que el agua de la alberca había adquirido un color verdoso. En lugar de reprogramar el torneo o modificar su sede, los dirigentes contrataron una empresa para tratar de resolver con productos químicos el mal estado del agua. Pero se presume que la compañía no utilizó la debida cantidad de productos sobre el agua, además de no contar con el tiempo suficiente para dejar trabajar los componentes químicos antes de que la piscina volviera a ser utilizada. Y los organizadores desconocían que el nivel de cloro del agua era demasiado alto.
Aún así, ya era sabido antes del inicio del certamen que la calidad del agua no era la mejor, por lo cual varios clubes y atletas decidieron no presentarse en la competencia.
La prensa mexicana informó que 400 atletas recibieron algún tipo de atención médica por problemas en la piel o en los pulmones durante el desarrollo del torneo, que se disputó del 12 al 18 de diciembre.