A medida que se acecha el Campeonato de España Absoluto Open, clasificatorio olímpico, y los nadadores ultiman sus preparativos, SwimSwam ha podido saber que la cita no contará con la presencia de una de las grandes bazas de la natación española de cara a Tokio.
Hugo González, quien actualmente nada para la Universidad de California-Berkeley en los Estados Unidos, no estará presente en la cita esta semana que entra. El Campeonato de España Absoluto Open está programado del miércoles 24 de marzo al domingo 28 de marzo.
El motivo de su ausencia se debe a que las fechas de ambos campeonatos se superponen en el calendario, ya que los campeonatos universitarios de la NCAA asimismo están previstos para comenzar el 24 de marzo y finalizar el 28 del mismo.
González comenzó su trayectoria universitaria con Auburn en el otoño de 2017, aunque solo permanecería ahí durante un año. De ahí se trasladó a Virginia Tech donde asimismo acabaría trasladándose hasta California-Berkeley, donde está afincado en el presente.
Aunque González no imaginó que la pandemia viniera para truncar el último tramo de su temporada inaugural con California-Berkeley.
“En cierto modo, me ha venido incluso bien el hecho de haber podido parar, no en el sentido deportivo pero más bien en el sentido un poco mental porque yo creo que haber estado tanto tiempo en casa y tenido tanto tiempo para pensar sobre los objetivos, por qué he nadado y dónde quiero estar, pues yo creo que me ha venido bien para recordar un poco por qué quería venir a California,” asintió el nadador. “La verdad es que este año el comienzo ha sido un poco extraño”.
Además de truncar el último tramo de la pasada temporada universitaria, la pandemia obligó a postergar los Juegos Olímpicos de Tokio por un año. Unos Juegos que González refrenda con la misma mentalidad, a pesar de haber sido atrasados un año.
“Creo que no dejan de ser unos Juegos y no dejan de ser especiales, y más bien lograr las mínimas es un poco de confianza y de tranquilidad, de saber que el trabajo que estamos haciendo está bien hecho”, reconoció González, quien ya logró las mínimas olímpicas en los 100 espalda y 200 estilos durante el Trofeo Castalia Castellón del pasado mes de diciembre.
De hecho, durante estos meses de pandemia, González estuvo entrenándose en Madrid con su club, el Real Canoe, antes de regresar a los Estados Unidos para volver a competir a nivel universitario este semestre.
En cierto modo, dice González, este paréntesis le ha servido para centrarse un poco en otras pruebas aparte de los 200 espalda y los 400 estilos.
“Al final con todas las competiciones en la universidad, como que todo va en grupo y entre comillas la suerte que he tenido de estar en casa, haber estado en España es haber podido dar un toque un poco más personal,” añadió González. “Cambiar los entrenamientos, si no me gustaba el horario sí que tenía flexibilidad con mis entrenadores en el Canoe de cambiar el horario, cambiar de pruebas porque siempre son las mismas, y yo creo que por eso he hecho una de las mínimas que ha sido el 100 espalda ha sido, por cambiar un poco la mentalidad y dejar un poco de lado el 200 espalda y los 400 estilos”.
A medida que González se adentra en la recta final de cara a sendos campeonatos universitarios, comenta el nadador que ya redujo el volumen de metros en la piscina, pudiéndose centrar así en otros aspectos como pueden ser la nutrición o las horas de descanso.
Con respecto a su futura participación olímpica, González muestra optimismo en lo que a sus pruebas se refiere.
“Si tuviera la oportunidad de nadar más pruebas [en los Juegos], sí, seguro; yo creo que cuantas más pruebas se puedan nadar, y más en unos Juegos, pues, más experiencia y sobre todo, más oportunidades de hacerlo bien”, comentó. “Si pudiera tener la oportunidad de competir y que la federación española valorase las marcas que hiciese sí que lo intentaría por ejemplo en 200 espalda, o clasificarme en algún relevo. El objetivo es igualmente seguir preparándome para que si me dan la oportunidad pues nadar bien, y si no, pues nadar y lograr la marca para mí”.
González ya fue olímpico en Río en 2016, con tan solo 17 años, donde en los 200 espalda se clasificó para la semifinal olímpica, una experiencia que reconoce, le ha ayudado a ganar cierta autonomía en el agua.
“Lo que mejor me ha venido es ser un poco más independiente en el sentido de que, yo creo que para unos Juegos, al haber ido con tan temprana edad, pues dependía totalmente de mi entrenador,” afirmó. “Si no estaba él, no sabía qué tenía que calentar, cuando tenía que suavizar, cómo tenía que comer, en general, como cuidarme. Lo bueno de estos años es que a pesar de haber tenido resultados tan consistentes año tras año, pues sí que he podido crecer en ese sentido como un nadador un poco más independiente”.