A 100 días de los Juegos Olímpicos París 2024, tuvo lugar en Olimpia, Grecia, el momento simbólico del encendido de la llama olímpica.
La llama, una tradición olímpica desde Berlín 1936, actúa como vínculo entre los Juegos de la Antigüedad y los modernos.
Después de 100 años desde la última vez que los Juegos Olímpicos se celebraron en la capital francesa, el país acogerá la llama olímpica por tercera vez en suelo francés el 8 de mayo en Marsella. La llama visitará más de 400 pueblos y ciudades francesas mientras recorre el país antes de llegar a París.
El Comité Olímpico Helénico organizó la ceremonia de encendido, en la que la llama olímpica cobró vida siguiendo la pura tradición antigua de los Juegos de utilizar los rayos del sol en Olimpia.
En un guiño al fuerte legado acuático de Francia, la tres veces medallista olímpica de natación y tres veces campeona mundial Laure Manaudou fue la primera francesa portadora de la antorcha.
La medallista de oro olímpica en Atenas 2004 (400 m estilo libre) tomó la antorcha encendida de manos del primer portador de la antorcha, Stefanos Douskos, remero griego que ganó en Tokio 2020+1.
Para rendir homenaje a los orígenes de los Juegos, la Llama realizará su recorrido en Grecia. 600 portadores de la antorcha recorrerán 5.000 kilómetros en 11 días visitando 43 municipios griegos.
La Llama pasó frente al monumento a Pierre de Coubertin en Olimpia, y también por la ciudad de Pylos para resaltar el vínculo histórico con la batalla naval de 1821, cuando Francia luchó junto a Grecia por su independencia.
La ruta finalizará con la ceremonia de entrega de la Llama el 26 de abril, en el Estadio Panatenaico de Atenas. Su llegada a Francia se producirá en la ciudad portuaria del sur del país, Marsella.
Diez mil portadores de la antorcha llevarán la llama durante el relevo de la antorcha en Francia, con un grupo que abarca desde los más grandes campeones hasta personas anónimas con historias individuales extraordinarias.